Mil años después de la caída de la civilización, un bosque contaminado formado por hongos dispersa sus miasmas letales por la tierra en ruinas poniendo en peligro a lo que queda de la raza humana.
Esta historia postapocalíptica se basa en los mangas de Hayao Miyazaki. Gracias al acto del hombre, la tierra se encuentra en su estado más decrépito y agonizante, pocas civilizaciones quedan y luchan contra el avance de la plaga de hongos venenosa que se extiende por toda la superficie. Nausicaä, princesa de la pequeña Región del Viento, es una guerrera de corazón puro que será la única que podrá encontrar la clave para salvar a su pueblo y al ser humano de la total extinción.
"Tengo miedo de mí misma, no sé qué puede provocar el odio en mí. No quiero matar a nadie."
La destrucción y el cataclismo son temas muy desarrollados en la cultura del cine y la animación japonesa, y Miyazaki patenta su preocupación personal en muchas de sus creaciones, dándoles, sin embargo, un toque de luz y positivismo, pues la esperanza es algo que siempre está presente en la historia de Nausicaä, de las cenizas resurge una nueva vida.
Nausicaä no forma parte de la colección Estudio Gibli, pero fue la precursora del nacimiento de este gran equipo de profesionales de la animación y el cine. Además, Miyazaki inicia su labor en apoyo a la figura de la mujer desde sus inicios: lleva toda una vida mostrando, no adoctrinando, poniendo de relieve lo que verdaderamente cree, siendo justo y equilibrado, imperfecto, porque así es la realidad.
En 1984 se estrenó esta film, se plantó una semilla que daría grandes frutos y su mensaje llegaría a lo más profundo del corazón. Nace una nueva ciencia ficción, una nueva heroína, una nueva filosofía.
Es una de mis películas favoritas en el campo de la animación, os invito a verla.
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